+ []+ []+ []+ []+Capitulo 2 "Memorias"+ []+ []+ []+ []+
Cuando el atardecer llega todo se tiñe de un tono rojizo, en el lago una pequeña cabaña de madera que alguna vez estuvo habitada por “él”, resguarda sus memorias de la oscura noche. Llegando a la entrada principal Light giro la perilla y se adentro a ese mundo al que le encantaba volver, porqué ese lugar era su mundo, suyo, y de su amado.
En este mundo intentaste no dejarme solo
No hay otra manera,
Rogué a los dioses: ¡Déjenlo quedarse!
Mis memorias borran el dolor interno
Ahora se por qué sigo regresando aquí
El interior era rustico pero hogareño, en el ambiente se podía respirar un aire frío y nostálgico volviéndose cada vez mas oscuro puesto que el sol que entraba por las ventanas, cuyas cortinas eran delicadas telarañas, se ocultaba rápido tiñendo lo que una vez tuvo un tono rojizo en un color grisaceo. En una esquina al fondo del salón un piano, un violín y una guitarra que alguna vez fueron los confidentes de sus mas grandes sentimientos descansaban pacientemente, recordando como a su pequeño le encantaba que cantara para él, camino lentamente en dirección a sus “confidentes”, como si al hacerlo se acercara más a su angel, casi sintiendo que lo podía tocar.
Todos mis recuerdos te mantienen cerca.
En momentos de silencio imagino que estas aquí
Todos mis recuerdos te mantienen cerca
Tus silenciosos susurros, lágrimas silenciosas
Tomando el violín empezó a entonar una canción que parecía cantar por él lo que sentía en esos momentos, y al no aguantar más su pena grito:
-¡Maldito sea el momento en el que nací como vampiro!
-¿Así que te sigues atormentando por eso, eh?- Una voz grave lo había sacado de sus pensamientos asustándolo al principio pero calmándolo al reconocer la voz de su portador.
- ¿Cuantas veces te lo he dicho? - preguntó en reproche el castaño al enfocar sus ojos en la silueta que estaba en la puerta de la cabaña - no me gusta que me sigan - el otro sólo encogio loa brazos y ladeaba su cabeza de forma despreocupada, algo que al ojimiel le molesto - ¿Que estas haciendo aquí Matt? - suspiro cansinamente ya conociendo la respuesta que recibiría.
Matt era alto (quizá unos centímetros más que Light, y bueno era fácil adivinarlo puesto que Matt tenía 26 años y Light 23 (n/a- Sí, aqui Matt es más grande), también era atractivo, su cabello era rojo y sus penetrantes ojos eran color esmeralda. Vestía unos pantalones negros un poco ajustados, botas de cuero negro, una camisa de color vino de cuello “v” y una larga gabardina negra.
- Lo mismo que he estado haciendo todas las veces que desapareces del castillo: Buscándote - contestó entre triste y sereno mientras notaba como Light mirando a travez de la ventana solo pudo entonar un "Comprendo" en respuesta.
Me hiciste prometer que intentaría encontrar mi camino de regreso a la vida.
Tengo la esperanza que hay una forma de saber que estas bien.
Recuerdo otra vez todo lo que vales
Entonces puedo seguir adelante.
-Light debemos volver pronto o todos se preocuparan- pero él no escuchaba y en vez de hacerle caso entró en una de las habitaciones del lugar. Matt al no ver más opción siguió a su amigo, entrando en la puerta que estaba a la derecha del salón, justo al lado del piano, ahí encontró a Light sentado enfrente de lo que parecía ser un baúl blanco -ya abierto- debajo de la ventana
- Light, ¿Que estas....?
-Pastel - le interrumpio el chico
-¿Disculpa? - preguntó enarcando una ceja no entendiendo bien a que se referia con eso
-Le encantaba comer pastel- decía mientras sacaba un traje negro y una filipina de chef blanca –Sobre todo los de aquella repostería – esta vez sacaba un libro cuyo contenido era indeciso, la portada era blanca con adornos negros y plateados Light al abrirlo dibujo en su rostro una calida sonrisa y se abrazó con el libro en sus manos, cerrando los ojos disfrutando cada momento.
Todos mis recuerdos te mantienen cerca.
En momentos de silencio imagino que estas aquí
Todos mis recuerdos te mantienen cerca
Tus silenciosos susurros, lágrimas silenciosas
A Matt le extraño en demasía el comportamiento que su amigo tenia hacia ese libro. Desde hace tiempo que su mirada era triste, rayando en lo gélido, su actitud se había vuelto reservada y distante, no le importaba lo que le pasara a los demás y eso se estaba volviendo un problema.
Pero ¿Qué estaba pasando ahora? Por un instante Light parecía volver a ser el de antes, aquel chico sonriente con el que compartió tantos momentos inolvidables pero en cierto punto parecían tan lejanos cada vez que recordaba la miraba que caracterizaba a Light en ese entonces, tan calida y expresiva, esa que en algún lapso de su vida se fue desvaneciendo en la soledad.
-¿Oye nostálgico y ese libro? - preguntó sonriente intentando averiguar porque ese libro parecia significar tanto para su amigo.
-Se llama “Fonteiuos Vitae”
-¿“ Fonte...” qué? - dijo sintinedos incapaz de repetir aquel extraño nombre.
- “Fonteiuos Vitae” Es algo así como su diario, contiene recetas de pasteles, una fotografía de su primer día en el trabajo, una rosa seca, poemas, varios dibujos que el hizo...le gustaba mucho dibujar - recordo sonriendo melancolicamnete - decía que lo relajaba
-¿Lo? - inquirió frunciendo el ceño al notar como parecía que su amigo se estaba refiriendo a un hombre, no es que él viera con mal ojos aquello, al contrario, varios de su raza n incluso él mismo habia mantenido relaciones homosexuales, al final la atracción es inevitable siendo el genero lo último que importaba. Sin embargo por el bien de mantener la debil paz en el castillo era mejor que, si Light tuviera una pareja estable, esta debia ser una mujer.
-Sí, pero ahora no esta aquí, al menos no físicamente - declaró en tono molesto sintiendose impotente al no poder hacer más que aferrarse a lo único que le queda de su amado.
Junto con todos esos recuerdos veo tu sonrisa
Todos los recuerdos que conservo, querido.
Cariño sabes que te amare hasta el final de los tiempos
-¿Light, de quien me estas hablando? - preguntó exasperado sus sospechas terminaron vermando su serenidad, por una parte estaba inquieto por la rspuesta que el chico frente a él le daría, si estaba enamorado de un hombre su padre no estaría muy de acuerdo con la relación, no porqué fuera homofobico, sino porqué Light al ser su hijo necesitaba engendrar un heredero, algo que un hombre no le podría dar.
-De la persona mas hermosa que he visto en toda mi existencia - respondió con los ojos brillantes ante la imagen de su niño, embelesado por su recuerdo.
-...- En la cabeza de Matt casi se habia reproducido -hasta el más minimo detalle- el conflicto padre-hijo que se armaría si el ser amado de Light era un chico, pero sonrio al darse cuenta que, sin importar cuan mal esten las cosas, él siempre estaría al lado de su amigo, ayudandolo en lo que pudiera. Y con ese pensamiento logró calmar su mente lo suficiente como para "molestar" un rato a Light - Creo que alguien esta enamorado...ya era hora - su tono al principio burlón cambio al darse que cuenta que, en efecto, el castaño nunca se había enamorado de alguien, hasta ahora - ¿De quién se trata Light? Dime, dime - insistió curioso
-Bueno él ya no esta aquí - le explicó al pelirrojo sin notar como el mayor parecía hacer un gran esfuerzo por no alterarse al confirmar su sospecha.
- ¿Porqué? ¿Paso algo?- aun apesar del latente peligro en el que estarían si aquello se daba a concer con malas intenciones -algo que Light parecía no querer notar- sinceramente esperaba que no hubiera sido nada grave lo que habia propiciado que "él" ya no estuviera.
-¿“Algo” dices...? Sí, la verdad es que paso lo que más temía en este mundo... - Apretó sus puños con esa furia que sentía cada vez que pensaba en aquello-...nuestra, separación.
-...- “Otra vez esa cara de depresión ¿Porqué Light? Por qué siempre que alguien toca ese tipo de temas tus ojos se vuelven tristes y pones esa misma expresión, que es lo que te tiene tan sujeto al pasado, que haz hecho para sobrellevar esto solo, que te hace sonreír y llorar a la vez, por qué esas memorias son tan preciadas para ti, que te motiva a no dejarlas ir”
Todas mis memorias te mantienen cerca.
En momentos de silencio imagino que estas aquí
Todos mis recuerdos te mantienen cerca
Tus silenciosos susurros, lágrimas silenciosas
Una manta de seda morada protegía un collar con un colguije, símbolo del amor eterno, en medio un granate de intenso color rojo, decorando en todas partes pequeños rubíes incrustados, como soporte una plateada y gruesa cadena emblema de la fuerza. Ese collar fue lo último que saco de ese baúl ahora vacío. Lo coloco alrededor de su cuello y al cerciorarse de que estuviera bien sujeto lo observo sosteniéndolo en su mano dulcemente, hasta que ese lastimero recuerdo volvió a él, obligándolo a apretar ese colguije prueba de su promesa
-¿¡POR QUE!? ¡DEMONIOS! ESTO NO DEVIO DE HABER PASADO- se levantó de inmediato cegado por la ira, la tristeza y la desesperación- ¡Maldigo el día en que se impuso esa regla, por eso se acabó, por eso todo termino así!- golpeaba los muros de madera como si estos absorbieran toda esa frustración- !¡POR QUÉ NO PUDE MANTENER MI PROMESA?! ¿¡POR QUÉ ME OBLIGARON A SER ALGO QUE YO NUNCA PEDI?! ¿¡POR QUE!? –
¿Por qué él tenía que ser un candidato a jefe de los vampiros? Cargando sobre sus hombros la continuidad de su existir. ¿Por qué al faltar con su responsabilidad aquel mundo donde coexistía con los demás ardería en las llamas de su pecado?
Un pecado que todo vampiro evita cometer, ya que ese tabú era una daga de doble filo, un mal de donde solo se sale de dos formas al cometerse:
1.- Seguir “vivo” pero con una tristeza que te corroe por dentro sintiéndo como cada día algo dentro de ti se moría, dejando ese vacio en tu interior.
2.- Morir en manos ajenas sin poder hacer nada más que desaparecer en cenizas...polvo que el viento barrera rebajando tu existencia a cero.
Por eso era la peor falta, un desliz que no podía ser mencionado ni siquiera en una plática casual, una prohibición imperdonable cuyo significado es la peor de las traiciones no sólo para tu mundo, también para el de los demás, el peor de los pecados: Enamorarse de un humano.
-¡Light calmate por favor!- Matt agarro las muñecas del menor para que no se siguiera lastimando, pues los golpes sobre la dura madera eran tan fuertes que la sangre se hizo presente casi al instante.
-¡SUELTAME! . exigió el castaño
- !No lo haré, no pienso quedarme inmóvil mientras uno de mis parientes se hace daño!
- Si es por mis manos...
- No se trata de eso - le dijo seriamente pero entonces notó como el otro chico ensanchaba los ojos y curvaba una de sus cejas, mirandolo inquisitivamente, así que prodigió - Yo hablo de lo que te hiere por dentro.
- Suéltame, por favor...- pidió ya mas calmado pero Matt dudo un poco de esa petición que le hacían cosa que, al parecer, su protegido se dio cuenta, viendo como el otro sonreía para intentar calmarse - Pometo no volverlo hacer - convencido de aquello el ojiverde lo soltó- Gracias - Light, ya libre del agarre, se recargó sobre la pared que estaba frente a la puerta, cayendo hacía el piso se sentó, abrazando sus piernas, escondiendo su rostro en ellas.
Matt se acerco a él lentamente pues no quería que se volviera a alterar ya frente a el se inclino y poso su mano derecha en la cabeza de Light señal de apoyo
-Light
-Matt yo...tengo que confesarte algo
-¡¿eh?!
